El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, reveló en una entrevista con The Washington Post publicada el lunes que a menudo recibe mensajes amenazantes.
“Muchos mensajes que amenazan la vida”, expuso. “Amenazas directas a mi SMS [móvil]. No sé cómo descubrieron mi número”, agregó.
Como consecuencia, el jefe de la OMS ahora cuenta con un sistema de alarma instalado en su casa y se enfrenta a crecientes peticiones de su personal para que contrate un equipo de seguridad permanente.
Según el diario, “el covid-19 convirtió a Tedros Adhanom Ghebreyesus en un blanco”. No obstante, subraya que continúa su actividad: en concreto, ha presionado a China para que reanude una investigación sobre los orígenes del virus y abandone su política ‘cero covid’. Además, insiste en la necesidad de firmar un tratado internacional de preparación ante pandemias.
Ghebreyesus cree que es prematuro decir que la pandemia del coronavirus ha cesado. “Todavía estamos en medio de una gran guerra”, señaló.
Otro tema controvertido que el director de la organización ha planteado repetidamente es el conflicto en Etiopía. “No creo que sea seguro para mí [regresar a Etiopía]”, dijo, aunque agregó que solo “dice la verdad” sobre Tigray.
Tedros, de etnia tigrayana, nació en 1965 en el ahora territorio de Eritrea. Su padre trabajaba en el Ejército, mientras que un hermano menor murió de sarampión. Fue una tragedia que, según Ghebreyesus, lo motivó a trabajar en la salud pública.
“Soy un niño de guerra”, enfatizó. “Desde la infancia, he estado condicionado para situaciones difíciles”, añadió.